Ya he dicho en alguna ocasión que la única, si se le puede llamar así, red social que utilizo a diario es Twitter, aunque no publico mucho. La razón es que creo a veces que lo que tengo que contar no le interesa a mis seguidores, no sé si con atino o no. En todo caso, a veces realmente siento vergüenza ajena al leer a algunos de los que sigo. Hace tiempo leí en twitter: «Al principio, Twitter PARECE un ejercicio de exhibicionismo. Sólo con el tiempo, comprendemos que ES un enorme ejercicio de exhibicionismo.» @abladias. Pensé que tenía razón Fernando.

Con el tiempo, me he dado cuenta de que es un acto de exhibicionismo pero profesional, sobre todo. Hay algunos que se dedican a utilizar twitter para contar con quién se reunen, a quién ven, con quién van a comer, quién les sigue, cuántos blablabla… vamos, que es un ejercicio de ver quién la tiene más grande. Los que mejor uso hacen de twitter se ve a la legua que no hacen esto. No sabrás con quién se ven, ni a quién… no les hace falta. Los que estamos en su entorno sabemos que lo hacen, pero no lo retransmiten. ¿Quiénes se dedican a hacer esto? Los que necesitan que la gente vea que son (o tratan de serlo) conocidos en un ámbito concreto. A mi habitualmente me transmite muchas carencias y alertas sobre estas personas. Como dice el refranero, dime de qué presumes… Sí, sé que puedo dejar de seguirles en cualquier momento (con un simple clic), pero es que a veces dicen cosas que me interesan. Sólo por eso me tengo que tragar su autobombo en un 90% de mi timeline. Es el precio, pero realmente el ruido es increible.

«Y lo a gusto que me he quedado… ;)» @davidperis jajaja